El Programa Integral de Apoyo al Ingreso, la Permanencia y el Egreso (PIA) se llevará adelante durante el segundo semestre de 2024 y hasta marzo de 2025 en cuatro centros educativos: dos de Montevideo, el Liceo Nº. 65 y el Liceo Nº. 61, uno de Paysandú y uno de Tacuarembó. La implementación de este plan se realiza en coordinación con el Consejo Directivo Central de la Administración Nacional de Educación Pública (CODICEN), con el Consejo de Educación Secundaria (CES) y con autoridades y docentes de cada liceo. Aunque la Udelar y las autoridades del CES y CODICEN ya habían realizado dos instancias previas de presentación del Programa en el mes de agosto dirigidas a estudiantes de los liceos de Montevideo que participan de la propuesta y sus familiares, en esta oportunidad se realizó la presentación pública del PIA.
En la presentación estuvieron presentes el rector de la Udelar, Rodrigo Arim, la prorrectora de Enseñanza de la Udelar, Estela Castillo, la coordinadora del Programa de Respaldo del Aprendizaje de la Udelar (PROGRESA), Carina Santiviago, la presidenta del Servicio Central de Inclusión y Bienestar Universitario (SCIBU), Mercedes Pérez y autoridades de la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP).
Arim fue el responsable de la presentación del Programa y el Plan piloto y dividió su exposición en seis partes: Introducción; Antecedentes; Objetivos que se plantea la Udelar en el marco de este programa; Niveles de intervención y articulación de dispositivos; Coordinación, evaluación y monitoreo y Experiencia piloto 2024-2025.
Desafíos de la universalización de la educación superior
La introducción estuvo relacionada con los motivos por los cuales la Udelar entiende que la propuesta es importante para el país. Arim señaló que aspiran a que este programa en algún momento trascienda a la Udelar y atienda los tránsitos de la educación media hacia la Udelar pero también hacia la formación docente, la UTU, la UTEC, es decir al Sistema de Educación Pública en general. Entre las motivaciones más importantes de la Udelar para llevar adelante este Programa, Arim destacó que el porcentaje de personas que acceden a la educación terciaria superior registra un crecimiento acelerado en el mundo, tendencia que se mantiene en la actualidad, se estima que en 2030 el 50% de cada cohorte a nivel mundial contará con algún grado de formación terciaria, la mitad de los cuales va a egresar de este nivel educativo.
A nivel mundial en las últimas dos décadas la tasa bruta de matriculación terciaria aumentó de un 23,1 % a un 54, 1%, Uruguay es uno de los países de la región que muestra mayores avances en la última década. Entiende que este contexto plantea desafíos en cuanto a instrumentar políticas para afrontar las dificultades que se presentan hoy en Uruguay para que los jóvenes puedan avanzar en su proceso formativo. «Se requieren políticas específicas que sostengan los procesos de aprendizaje y finalización de la educación superior», sostuvo el rector y en ese sentido recordó que la Udelar se encuentra todavía con un porcentaje de egreso un poco menor al 50%. Entiende que para que avance el proceso de democratización de la educación terciaria superior se requiere que este se apoye en trayectorias educativas sostenidas en el tiempo y para que estas sean posibles es necesario instrumentar políticas e integrar a los estudiantes a comunidades universitarias y de educación terciaria sólidas.
Antecedentes y acciones a desarrollar
En cuanto al espacio de la presentación del rector, dedicado a los antecedentes, se vinculó con los instrumentos con los que ya cuentan las instituciones para sostener los procesos de tránsito de la educación media a la educación superior. Entre los que ya ha instrumentado la Udelar destacó el Programa de Becas del SCIBU, las políticas de mejora de los procesos de enseñanza y aprendizaje de la Comisión Sectorial de Enseñanza, como el PROGRESA, y las que llevan adelante otros espacios en la Udelar.
Sobre los objetivos Arim señaló que en el Programa se plantearon «un conjunto de acciones coordinadas y coherentes entre sí, dirigidas a incrementar el acceso, pero también la permanencia en la educación superior. «A Uruguay no le sobran sino que le faltan muchos estudiantes universitarios», añadió. Entre los objetivos específicos del Programa Arim señaló que se busca promover un espacio de articulación interinstitucional de políticas, como una forma de sumar a los actores con los que la Udelar ya venía trabajando como la ANEP, otros nuevos como el Ministerio de Desarrollo Social (MIDES) e instrumentar un acuerdo con una lógica mucho más sistémica.
Arim explicó por otra parte que el programa fue diseñado con cuatro niveles de intervención: el preingreso; el ingreso; la continuidad y avance académico y el egreso. Parte del Programa coloca el foco en asegurar el acceso a una beca al ingresar a la Udelar, a todos los estudiantes beneficiarios hasta los 17 años del programa de Asignaciones Familiares del MIDES. Con esta medida buscan revertir la discontinuidad en el apoyo que sufren los jóvenes de las poblaciones con un mayor nivel de vulnerabilidad, que al llegar a los 18 años pierden esta prestación y deben volver a realizar los trámites para acceder a una beca que les permita su continuidad educativa.
El rector resaltó en la 5ª parte de su exposición que para que todo lo planteado anteriormente sea posible es imprescindible que exista una coordinación a la interna de la Udelar y con todos los actores institucionales involucrados así como una monitorización y evaluación constante para corregirlo en caso de que así se requiera.
Plan piloto
En cuanto a la Experiencia Piloto Arim explicó que se desarrollará entre 2024 y 2025 y está dirigido especialmente a las poblaciones con un mayor grado de vulnerabilidad. Se pensó para que sea la base de un programa más permanente en el tiempo que se está discutiendo en la actualidad en la Udelar y está diseñado con dispositivos especialmente enfocados en los niveles de preingreso e ingreso. La primera etapa de este Plan se inició en el segundo semestre de 2024, implica un trabajo con los estudiantes de educación media superior de cuatro centros educativos y coloca un foco particular en hogares con vulnerabilidad socioeconómica, con el fin de concentrar recursos en esta trayectoria y en los estudiantes que requieren un mayor nivel de apoyo. El Plan apunta a acompañar a los estudiantes en esta trayectoria y promover su inserción y continuidad educativa en la educación superior. Además de la articulación de los dispositivo de apoyo, los y las estudiantes que fueron beneficiarios de Asignaciones Familiares Plan de Equidad (AFAM) recibirán una beca otorgada por la Udelar equivalente a 2 Bases de Prestaciones y Contribuciones (BPC).