En particular, el documento final reconoce en su punto 21 el compromiso de los Estados de invertir en sectores productivos y fomentar la creación masiva de empleos decentes, con foco en el desarrollo de habilidades y el acceso equitativo a oportunidades económicas. Se expresa con claridad el impulso al emprendimiento social, especialmente entre mujeres y jóvenes, y se afirma el compromiso con el fortalecimiento de MIPYMES, cooperativas y la economía social y solidaria, en el marco de una industrialización sostenible e inclusiva. Asimismo, se reconoce el aporte de la cultura y la economía creativa al desarrollo sostenible.
Del mismo modo, el punto 32 destaca el rol de las cooperativas como actores clave para fortalecer la resiliencia y la inclusión financiera. En ese marco, se promueve el desarrollo de mecanismos de seguros y gestión de riesgos adaptados a las necesidades de cooperativas, agricultores, MIPYMES y otros sectores vulnerables, así como la implementación de instrumentos financieros alternativos frente a desastres y variabilidad de precios. Al mismo tiempo, se llama a eliminar barreras estructurales que limitan el acceso al financiamiento, en especial para las MIPYMES lideradas por mujeres, a través de microcréditos, cooperativas de crédito, bancos de desarrollo y líneas específicas de crédito accesible.
Estos avances son el resultado de un proceso de incidencia articulado a nivel regional, liderado por el Comité Regional de las Partes Aliadas de Cooperativas de las Américas, -que INACOOP integra-, con especial protagonismo de su copresidenta, la embajadora Paula Narváez Ojeda, y con el respaldo de agencias de Naciones Unidas como CEPAL, FAO, OIT, UNESCO y ONU Mujeres, así como de los gobiernos y comités nacionales que promueven políticas públicas favorables al cooperativismo.
Durante la conferencia, Cooperativas de las Américas también tuvo una activa participación en reuniones paralelas y eventos temáticos. El director regional, Danilo Salerno, fue expositor en el evento titulado “Evaluación auténtica de la sostenibilidad en la Economía Social y Solidaria (ESS) en el marco de la financiación para el desarrollo”, coorganizado por el Ministerio de Trabajo y Economía Social de España, el Arizmendiarrieta Social Economy Think Tank (ASETT) y el Instituto de Investigación de las Naciones Unidas para el Desarrollo Social (UNRISD).
Esta participación reafirma el compromiso del movimiento cooperativo internacional con una economía centrada en las personas, democrática, transparente y plenamente alineada con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).