Los vehículos, de la marca brasileña Marcopolo y modelo Volare, poseen 33 asientos para pasajeros, son diesel, automáticos, y están equipados con aire acondicionado, cámaras de retroceso e interiores. Dos de ellos cuentan con accesibilidad para personas en sillas de ruedas.
La inversión total en los seis ómnibus asciende a 785 mil dólares, financiados por la Intendencia de Tacuarembó y el Fondo de Incentivo de Gestión para Municipios. Según explicó el Intendente Wilson Ezquerra, la adquisición se realizó a través de una licitación pública y busca mejorar la calidad y comodidad del transporte, reducir el tráfico vehicular y las emisiones contaminantes, y optimizar la conectividad en el departamento.
“Queremos que se les dé el mejor uso y que los ciudadanos puedan disfrutarlos”, destacó. Asimismo, adelantó que la próxima semana se incorporará un ómnibus eléctrico, marcando un paso más hacia un transporte urbano más sostenible y se definirán nuevas líneas en función de las necesidades.