La actividad contó en la apertura con palabras, por la BNU, de la encargada del Área Gestión Territorial, Milagros Puentes y, del director, Valentín Trujillo; por la Agencia del Cine y el Audiovisual del Uruguay (ACAU), Facundo Ponce de León; y el ministro de Educación y Cultura, Pablo da Silveira.
Objetivos y alcance del proyecto
El proyecto, iniciado en el marco de la emergencia sanitaria, tiene como objetivo democratizar la información y el conocimiento mediante el acceso remoto a las colecciones de diarios del interior. Actualmente, trece departamentos forman parte de esta iniciativa: Colonia, Durazno, Flores, Florida, Lavalleja, Maldonado, Paysandú, Rivera, Rocha, San José, Soriano, Tacuarembó y Treinta y Tres.
La iniciativa se lleva a cabo en colaboración con las intendencias departamentales, que aportan equipamiento técnico y personal idóneo. La BNU, por su parte, se encarga de las capacitaciones para el uso de la tecnología, proporciona una nube para facilitar el intercambio de archivos y mantiene un sitio web como repositorio de las colecciones. Además, la BNU ofrece las publicaciones de los respectivos departamentos hasta 1953.
Impulso descentralizador
Según el ministro Da Silveira, este proyecto se enmarca en un impulso «descentralizador» de las políticas culturales del país. Destacó que es «algo valioso en sí mismo» ya que permitirá a los investigadores acceder a prensa del interior del país, ofreciendo una nueva perspectiva sobre los acontecimientos históricos. “Tenemos el corazón, la mente y la mirada puestas en el interior”, enfatizó el ministro.
Por su parte, Ponce de León, problematizó sobre lo poco que falta «para que una maquina tenga todo el saber humano», situación que «plantea una cantidad de desafíos», aseguró. En este escenario la biblioteca debe «incorporar nuevas miradas» para «poder seguir siendo vanguardia», indicó. «La tradición es la cosa más revolucionaria», subrayó el titular del ACAU.
En tanto, Trujillo, comentó las etapas que atravesó el proyecto, en el marco de la emergencia sanitaria, en un contexto que denominó como «ajeno» y que «nos generaba enorme ansiedad». Primero se restableció el Sistema Nacional de Bibliotecas Públicas (SNBP), que funcionó de forma dispar desde 1980 y que había recibido un impulso con la ley del SNBP en el periodo de 2005-2010, pero necesitaba ser bajado a tierra. Es así que comenzó el «cara a cara» con las personas que podían articular con la BNU, «no sin resistencias y desconfianzas» este proyecto empezó a andar y «repercute positivamente en un montón de actores culturales», enfatizó.
Son 35 personas las que trabajan y colaboran con el proyecto detalló Puentes. En relación con el acervo que se digitaliza, la encargada del Área, mencionó que existen unos cien títulos por departamento, con variedad tanto en la cantidad de ejemplares como en los años de permanencia de las publicaciones.
Mesa de intercambio
La actividad concluyó con una mesa de intercambio entre representantes del Centro de Documentación Daniel Vidart de Paysandú, Andrés Oberti; del Museo Histórico de Florida, Guillermo Montaño; y de la Biblioteca Pública Departamental Gral. Juan Antonio Lavalleja de Minas, Pablo Baubeta.