La Comisión que está integrada por las áreas de género de las 19 Intendencias, trabaja en forma coordinada e interinstitucional para promover políticas públicas que impliquen un cambio cultural en nuestra sociedad y que eliminen la desigualdad de género, promoviendo un entorno de cero tolerancia a la violencia.
Es posible construir una sociedad libre de violencia, donde las mujeres, niñas, niños, adolescentes y personas del colectivo LGBTIQ+,puedan desarrollarse plenamente con libertad, dignidad y respeto.
¿Qué entienden las Naciones Unidas por violencia contra la mujer?
La violencia contra mujeres y niñas sigue siendo silenciada por un sistema que facilita la impunidad de los agresores, la estigmatización y la vergüenza de las víctimas.
Esta violencia puede ser física, sexual y psicológica e incluye: violencia por parte de una pareja (maltrato físico y psicológico, violación conyugal, femicidio); violencia sexual y acoso (violación, actos sexuales forzados, insinuaciones sexuales no deseadas, abuso sexual infantil, matrimonio forzado, acecho, acoso callejero y cibernético); trata de personas (esclavitud, explotación sexual); mutilación genital, y matrimonio infantil.
Según la Declaración de la ONU de 1993, la violencia contra la mujer abarca actos que causan daño o sufrimiento físico, sexual o sicológico, así como amenazas, coacción o privación de la libertad, tanto en la vida pública como en la vida privada.
La violencia impacta la salud física, sexual y psicológica de las mujeres en todas las etapas de su vida, afectando su educación, empleo y oportunidades. Algunas mujeres y niñas, como aquellas en situación de vulnerabilidad o crisis humanitarias, migrantes, indígenas o con discapacidades, enfrentan mayor riesgo.
La violencia contra la mujer sigue siendo un obstáculo para la igualdad, el desarrollo y la paz, así como para el respeto de los derechos humanos.